No puedo ni quiero vivir sin amor. Rocío y Matute
No puedo ni quiero, vivir sin amor… es el titulo que usamos para esta divertida y tierna historia de amor, la historia de Rocio y Matute, una pareja de las que transmiten, cariño, alegría, emoción, amor, lucha, entrega y sacrificio…
Os dejamos con este Post escrito en primera persona por Rocio, ella nos cuenta como preparó y vivió su boda. Deseamos que os guste!
“ESTOY HACIENDO REALIDAD EL SUEÑO DE MI VIDA CON EL HOMBRE DE MIS SUEÑOS”
Con esta frase acababa las palabras que le dedique a mi marido el día de nuestra boda.
Porque los sueños se cumplen y por fin el 18 de Julio de 2014 se cumplía el nuestro, CASARNOS!!!
Cuando los chicos de Render me propusieron escribir este post enseguida dije, SI QUIERO!!! Y aquí estoy contándoos algunos detalles de nuestra boda!
El día en cuestión se refleja a la perfección en el Highlight, donde se puede ver lo MARAVILLOSO que fue!!!
Un día muy muy emotivo, divertido, lleno de sentimientos, donde lloramos mucho y reímos igual, lo pasamos en grande, fue INCREIBLE!!
Pero una boda no son solo esas horas, esas son el resultado de todo lo que se prepara durante muchos meses, es la fiesta, el colofón final, el momento de dejar de hacer cosas y disfrutarlo a tope, de tu pareja, de tu gente y de todo los que has preparado, y vaya si lo hicimos, al máximo!
Pero igual de intenso y de bonito son los preparativos. Para mí sin duda lo fueron. A mi que me encanta preparar cosas bonitas, organizarlas, pensar en cada detalle, hacerlos… yo estaba en mi salsa! Lo disfrute como una enana, fue mas de un año de no parar de organizar cosas y vivir momentos que nunca olvidare!
Unos de esos momentos fue cuando encontré mi vestido de novia, de Pronovias, fue flechazo! Tan sencillo, tan yo, sin apenas nada, pero es que no le hacia falta más porque era DIVINO, era MI VESTIDO! Como lloramos…
Tenía claro desde siempre que llevaría corona, y para conseguir la que le iba a la perfección a mi vestido confié en Paula deTocados Le Touquet, que enseguida capto lo que quería y diseño la corona que llevaría el gran día, que no podía ser mas perfecta! que talento tiene Paula por Dios….
Los zapatos los encontré rápido, amor a primera vista también, unos atrevidos peeptoes de CUPLÉ en color rosa fucsia/morado que le darían al look romántico que luciría un toque de color.
Decidí que el ramo debía ir acorde con los zapatos, y fueron las maravillosas manos de Maria Salazar las que crearon el ramo de estilo campestre en tonos rosas que yo quería.
Los dos teníamos clarísimo como queríamos que fuese el sitio donde se haría. Ese sitio fue la finca El Regajal, en Aranjuez.
Nos costó encontrar lo que buscábamos, pero desde que pusimos un pie allí supimos que ese iba a ser el lugar donde sellaríamos nuestro amor. La finca, una vez mas, nos enamoro, tenía todo lo que queríamos, el estilo, las vistas, los espacios, era 10! Como iba a lucir allí todo lo que yo tenia montado en mi cabecita…
La boda, a pesar de celebrarse en un lugar con mucho encanto, llevaría nuestro toque, nuestra personalidad y estaría llena de detalles para que todos lo disfrutaran!
Siempre, desde antes de estar prometida, tuve claro que quería una boda estilo campestre, así que desde mucho tiempo antes estuve cogiendo ideas e inspiración y poco a poco fui diseñando como seria nuestra boda, todo lo que tendría, la decoración, los detalles… Claro esta, que como apasionada del handmade que soy, la mayoría de las cosas las haríamos nosotros mismos con mucho mimo e ilusión, sería una boda 100% handmade!
Lo fuimos haciendo los meses previos, después de tener ya todo diseñado y organizado, nos pusimos manos a la obra! Fueron muchos días de hacer manualidades, sola, y con ayuda, del futuro marido, de la familia… fue paliza pero fue genial, la de ratos buenos que hemos echado… y a mi que me encanta, pues mas feliz que una perdiz! Aunque también cansado, todo hay que decirlo.
Pero sin duda mereció la pena, a la gente le encantó y lo disfruto muchísimo, así que objetivo cumplido!
Para el gran día contamos con Eva de Bodas Colorin Colorado para que fuera nuestras manos y montase todo lo que habíamos preparado. Menuda es Eva, que gran persona y que descubrimiento haberla conocido…
La boda estuvo ambientada con muchos espacios, siempre siguiendo el estilo campestre y la paleta de colores que elegimos, amarillo y blanco. Hubo rincón de limonada, conos de arroz, paipais, pañuelos para las lagrimas de felicidad, suelta de globos, mesa con libro de firmas, candy, el photocall de Cartonlab que triunfó, mermeladas homemade para las invitadas etc…cuidamos cada detalle, por que ASI SOY YO y no podía ser de otra manera!
Y ahora que ya todo ha pasado nos toca seguir disfrutando con los recuerdos, con las maravillosas fotos de Fernando y Gosia, unos fotógrafos de los que hacen magia… amigos lo primero, pero a la vista esta que grandísimos profesionales, y menudas fotos hacen… nosotros ya les teníamos fichados, compartíamos ya un par de sesiones, y es que Fer me he criado, pero Gosia, ay mi Gosia, es brutal la tia! Que bien lo pasamos mi marido y yo cada vez que hacemos algo con ellos!
Y si con las fotos se nos cae la baba con este PEDAZO de video de los Render ya, ni te cuento!
Son unos cracks! Antes de todo, amigos también, y fan fan fan desde sus inicios! Por supuesto también teníamos clarísimo desde hace años que ellos inmortalizarían el gran día, no podía ser de otra manera!
David y Jan son únicos, lo que trasmiten con sus videos es de otro planeta…
Mil gracias chicos por todo, no habéis podido hacer un mejor trabajo! Espero seguir compartiendo cosas con vosotros!
Y ahora si os dejo con el video, esperamos que os guste! ¡Dale al play!